EL AMOR NO ES UN REO


EL AMOR NO ES UN REO 

Hay laberintos de amor que no tienen salida ni solución. 
Y es porque los que están dentro están perdidos en algo y solamente se le puede llamar: ¡posesión! Están encerrados en una amargura de querer tener y a su vez no saber nada del amor libre sin dominar; pues jamás queriendo poseer, podrán entender esa magia de querer ver feliz al otro... deseando su propia y la propia libertad, de algo que no se encuentra poseyendo, sino, dejando liberado ese suspiro, con la entrega de una ilusión hallándose  despejada de controles... siendo el liberador y elegido encuentro, tranquilo y bohemio, para amarse sabiendo desear felicidad, al amar y no atar por falta de creencia en la propia verdad, por haber carencias de amor propio y hacerse valer sin el sujeto y atado poseso de dirigir al ser, a esa esencia que se debería sin ataduras hallar y merecer. 
Es solo, sentir la dicha en el alma que se elige seguir y abrazar, pero con su vuelo al lado de la sensación de suspiros sin amarres, ataduras o nudos de falta de serena y cierta voluntaria decisión, esa de ir juntos al amarse y vivir lo lindo de sentirse sin hilar en dominantes hilos, eso que somete y para amarse no vale, pues es pesada tensión encelada, sin sostener una relación lejos de la poseída razón de querer sin amar de veras y por liberada voluntad, pues tener es propiedad y sentir un amor sin cadenas es dar vuelo a los corazones, sin medir si se palpita o se hace del ritmo un muy descompasado celo, ese que solo, arrebata lo bello del amor sin parámetros ni precintar al suspiro genuino de cada ser viajero, hay que ir sin dirigir lo suelto del sentirse amados sin hallarse presos...

—Miguel Á. POeT@ Intemporal ©.

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