MMCCCXXXV

MMCCCXXXV

En un futuro lejano pero preciso y costoso de haberlo conseguido, en el mundo mandan los poderes femeninos. Ellas derrocaron en 2303 a la jerarquía masculina, y el planeta era un estado de paz, armonía y gestores de la violencia que aún era residuo de la genética humana. Y los que gestionaban esa todavía deriva violenta, eran los hombres que habían dominado aquel instinto de dominación, para hacer de él, una virtud de aleccionamiento a los que nacían con residuos de la adversidad ante la paz diversa y de equitativo derecho. Vamos que la vida era constituida en una igualdad que educaba al ser en transcender su precariedad genética, y hacer de ella vida, hacia un transcurso hacia la inclusiva serena convivencia.

Hoy, a 2335 las naciones son regidas por un sistema político mundial, llamado: "gestiocracia - emocional”; basada, en una gestión desde el instinto maternal y habiendo abandonado la  institucionalización de la imperante masculinidad. 

Ahora, se vive con la doctrina educativa de razonar la emoción por encima de intereses y egolatrías, siendo unión el mundo con toda civilización y cultura, habiendo entendido el grueso humano de cada país y patria, que esa marcial nueva forma de mandar y gestionar, solo da paz, estabilidad, progreso y sabia es, en su limitación de asumida libertad, libre camino sin limitar ni dañar a nadie imponiendo la liberación del yo, sobre la genuina libertadora razón en comunidad.

—Miguel Á.

POeT@ Intemporal ©.