NUESTRA LUZ VERDADERA

NUESTRA LUZ VERDADERA 

Una eternidad nos hemos amado. Qué amargo que no ha llegado, qué aún no te siento. Yo he de volver a encontrarte. Tengo que poder otra vez amarte. Y si lo infinito lo impide, yo me alío con la muerte y sigo vivo, hasta hallarte. Hasta tener una vida con tu amor guiándome. Así como era antes, así como si jamás la existencia nunca hubiera puesto un final delante, esa frontera de olvidos, eso que me hiere dentro, ahí no hay alivio. Y es que yo te recuerdo, ¿no sé cómo puedo hacerlo...? Pero te veo, con aquel rostro, el último que he besado. ¡Ay, de mi suerte si no estás...! Pido al universo que nos una, qué nos dé otra oportunidad. Solo demostrar, poder hacerle saber a la inmensidad, que nosotros somos dignos de amarnos eternos, así sin que un adiós sea barrera para nuestro amarnos. ¡Te ruego destino, ten misericordia y ponme en su camino, deja que la una a mi alma por siempre, para que sepas que seremos tu luz que más brillará!

Sé piedad con nuestros corazones, abre tu vereda de coincidencias, 

y haznos almas de una sola verdad.

Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo

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