ALEGRE BARRIGA

ALEGRE BARRIGA 

El hombre con el tiempo coge barriga. 

No es falta de cuidado, sino que le gusta la comida. 

Siempre hay miradas que con prejuicio lo miran. 

Siempre hay personas que tienen risa de esa acumulación física. 

Pero, el que lleva esa bola entre la cintura y la garganta que grita, 

también es el que sustenta la alegría. 

Porque, sí, satisface su felicidad con repostería, y no siempre está mal cuidado ni cuida mal su forma física. 

Al individuo de holgada barriga

es que le gusta tanto vivir y disfrutar de la vida, que le dan igual los ojos que lo miran con envidia. 

Él se acaricia se mima y se quiere, porque tiene en alza su autoestima. 

Y aunque no lo desean, no lo quieren como el amor en la vida, 

es porque no lo conocen y no saben que su vientre es el gozo de su algarabía. 

Para todos, los que tienen algo de grasa acumulada en esa zona específica, va esta poesía, que tiene un tono de risa y un toque de ironía. 

Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 

POeT@ Intemporal ©.