ALGUNOS VERSOS...

ALGUNOS VERSOS… 

Siempre dudando. Siempre creyendo que se puede hacer más… 

Siempre siendo perspicaz, para no caer en el error de creer demasiado en los demás. Porque el dolor está ahí… forma parte de vivir, y solamente viviendo te das cuenta que no hay otra cosa mejor que vivir sin tener cargos de conciencia, porque no has hecho sufrir a ninguna otra esencia, eso es no caer en el abismo de la decadencia, siendo un caos que se marcha sin luz en la mirada, solo es que se apaga la posibilidad de haber llenado el mundo de amor y calma. 

La agudeza de lo físico, que carga lo psíquico, es el aprendizaje más preciso, de lo esencial de vivir para el espíritu. 

Hay almas en esta vida con cicatrices cerradas en falso. Van transitando en sus días llorando con lágrimas de fuego por dentro que siguen quemando. Son esencias que están con la alegría nublada, pero con la esperanza puesta en el tiempo, en el pasar de la vida, y de que algún día vuelvan a volar libres de esas cargas, ya sin pena ni doliente melancolía en sus adentros. 

Verás que un día encuentras a la persona correcta. Entiende que el destino no te lo pone al principio ni en la media travesía recorrida, pero ese alma está en algún sitio esperando también encontrar esa felicidad de amor y lealtad que se halla escondida. Y no es que esté ese ser a cosa hecha detrás de una puerta, o tras un muro de vivencias, sino que solamente espera atenta a que aparezca ese brillo en la mirada de la persona que entregará su corazón abierto, para llenarlo de alivio y de libertad enamorada. Verás que el tiempo también se enamora de lo paciente de los más verdaderos sentimientos. ¡Sí! La vida pasa, pero el amor no es por siempre un verso mudo y ciego, nada es más sincero que la deseada espera de amar sin remedio. 

Nada es más seguro, nada es más verdad, nada es tan doloroso y de fuego de angustia prendido. Yo sé de lo aprendido, que despedir a un ser querido es estar cerrando momentos de amor, es cambiar una realidad por un sitio vacío. Pero, sí, nada quita ese frío que en los días más felices se muestra en tu espíritu. Nadie puede tener la sensación de entender ese adiós, todos o casi todos por dejar ir hemos sufrido. No es que se marche nuestro amor, sino que de una manera sutil se va la decepción con el camino de una vida radical y rotunda, es tan certera en llevarse los amores lejos. Quiero que se sepa que nada es más que sentir el corazón vivo de latigazo vital, como tener lo querido lejos, pero en el pensamiento todavía brillando e iluminando el más presente anhelo, en el más vacío camino, pero se prosigue con el amor sentido y por sentir algo más herido. 

POET@ 

INTEMPORAL 

MIGUEL ÁNGEL 

PÉREZ SALCEDO ©.