VISLUMBRO EL AYER





VISLUMBRO EL AYER 


Desde la atalaya del hoy lanzo palomas blancas que son mis lágrimas. 

Gotas de templanza desesperada por un ayer de quiebro y lograda traza. 

Son recuerdos de una vez que fue clavado mi ser a un madero por sacrificios y dolores de tanto sufrimiento incierto. 

¿Qué trajo aquel incisivo perjudicar de la vida y sus senderos? 

Sí, oteando sigo desde este lugar privilegiado, aquello que fue sacrificio alzado hasta la cumbre desde donde hoy sigo divisando el delirante suspirar. 

Ay, gracias que no acabe ahogado en ese entierro de tierra de páramo amargado. 

Y soy guerrero tallado en mil batallas. 

Soy pájaro que vuela aún en el recuerdo de un sinsentido que casi soterra toda esperanza. 

Hoy sigo y continuaré tan vivo como quiero, pues ayer ya conocí la muerte, 

la muerte sentí, caminando de delirar por tanto cruel martirio intenso. 


Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 

POeT@ Intemporal. 

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