NI UNA NI DOS...

NI UNA NI DOS… 

No sé dónde estarás compañera. 

No sé en qué lugar, ni que complejidad tendrá mi encuentro contigo cizañera. 

Estás perturbando vida, tiempo; pues no sé en qué día te hallaré, para que me lleves y se acabe mi sendero. Quizás sea mañana, pasado o después de veinte años, lo que no sé ni el día preciso ni la hora en que vendrás y te llevarás este alma para vivir otra senda, con dolor y felicidad, por ser solo presencia moradora, que va terminando otra oportunidad de ser y poseer cima, honra y la vez de otra venida enfilada recta contada por tu descontar horas. 

¡Y sí!, serás duda y temor, pero hoy ya no temo, y así será con el pasar de otro tiempo nuevo. 

Después de tu adiós, así y prestada será la nueva prendida en sentimientos canción, ese es tu decir, solo mi esclava vida en tí, rendición. 

Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 

POeT@ Intemporal ©.