MOVIMIENTO EXISTENCIAL

MOVIMIENTO EXISTENCIAL 

Reflexión: 

Pongamos que hablo de algún país de África, de alguna aldea, de alguna mujer luchadora con una edad avanzada, de una señora que tiene tres hijos, tenía cinco, pero dos se los mataron los señores de la guerra, esos señores manipulados y comprados por el mundo evolucionado, mundo lleno de lujos. Pongamos que a su hija la violaron hace poco. Pongamos también que uno de sus hijos tiene una discapacidad, una parálisis cerebral. Pongamos que esta mujer se levanta cada día con una sonrisa, hace las tareas de su hogar, labra la tierra, ayuda a su hijo, le hace la higiene, le dá el desayuno, y coge a su hija y le hace un vestido con unas telas y le dice lo guapa que está, y la motiva para que continúe…, sabiendo esa madre que el malvado ser que le hizo eso a su hija sigue impunemente viviendo, porque las leyes de su país no castigan la violación, y esa destrucción de la emoción y arrancar la fragilidad de un ser humano. 

Pongamos ahora un país del primer mundo. 

Pongamos una mujer que tiene dos hijas estudiando una carrera, preciosas, que eso no es lo importante, ya sabemos… pero aún así no son feas precisamente. Las chicas tienen novio, son felices, su marido tiene un buen trabajo, ella tiene la tranquilidad en su micro mundo, puede hacer lo que quiera, tiene tiempo, tiene lujos, vamos que tiene una vida muy confortable. 

Pongamos que de repente empieza a sentirse triste, que cae en una depresión, que se quiere morir, que quiere alejarse de este mundo, y os preguntaréis: ¿cuál es la razón, que ocurre? 

Ahora imaginar que las energías vitales van viajando de un lugar a otro del mundo. El ser que tiene que sentir tanto padecimiento y desesperación tiene la voluntad del universo: de levantarse feliz y luchar por los suyos, y que todo su entorno sienta la alegría y el amor, y tengan la fraternidad para poder seguir adelante, haya pasado lo que haya pasado en sus vidas. 

Pongamos que toda esa energía negativa, toda esa desesperación del alma viaja de un lugar a otro, que algo divino lo traslada a los mundos dónde se vive bien, dónde no falta de nada, y entra esa energía dentro de los seres que lo tienen todo y de nada les falta, no tienen carencias. 

Pongamos que empiezan a sentir ese dolor del otro lado del mundo, que empiezan a sentirse abatidos sin ganas de vivir y de seguir adelante, aún teniendo una vida envidiada por tantos y tantos seres de otros lugares de esta tierra llamada mundo. No creéis que puede que si no se equilibran las cosas, y sigue habiendo dolor dónde no tendría que haberlo, y sigue habiendo luz y una sonrisa dónde más cruel y más tremenda tendría que ser la desesperación será por algo... 

Ahí lo dejo, sacar vuestras conclusiones, puede ser que sea un vital flujo equilibrando y dando sentido a las vidas de algunos, quitándoles tanto gozo y placer a las vidas de otros. Sin dudar que el mal ni siente ni padece, y este sí que tiene que ser combatido, por eso la lucha de que el mundo sea más equitativo y tengamos todos algo por lo que creer y luchar es siempre garantía: de que la unión es amor y enlaza la felicidad de nosotros mismos, y de los demás, para combatir el horror y esos poderosos que lo único que desean es complacerse, dándoles igual a quien pisen y a quien tengan que maltratar. 

Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 

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