HOY LLUEVEN VERSOS

HOY LLUEVEN VERSOS 

Hoy llueven versos en el cielo de mi imaginación. 

El aislamiento de mi tacto hacia otros se hace duro. 

Es un comienzo de pensar para poder apreciar todo eso que dejábamos pasar como libertad. 

Un suspiro al que no atendimos, del que no podíamos encajar todo su maravilloso y hermoso brillo de verdad. 

Porque es una caricia de luz, de la que solo esperábamos que estuviera ahí, no nos dábamos cuenta de que era algo tan precioso que teníamos que ser más conscientes del regalo: de tocarnos, abrazarnos y mirarnos encajando el deseo de ser un tacto, y no solo desear hacerlo. 

Hoy están lloviendo versos en mi habitación, y es una tormenta de imaginación. Porque este encierro dónde está ocultado el corazón, ese que late más fuerte cuando te abrazo, cuando te doy mi energía y te transmito la buena onda que tiene dentro, y de esencia te lleno, para que la sientas y saborees que yo también quiero ser feliz, viéndote sonreír y viendo que tú también lo eres. 

Cuando se vaya toda esta transitoria venganza de la biología, iré corriendo a la puerta de tu casa, te cogeré de las manos, te miraré con alegría, nos abrazaremos mucho más que antes, y nos entregaremos a vivir con más contacto la vida. 

No dejaré nunca de apreciar tanto ese regalo tan bonito y deseado, que es poder rozar al amor con mis manos, y así late, va luciendo la energía del corazón, por estar percibiendo el calor humano. 

–¿qué tal todo, bien?, hace atardeceres que no te siento amándose nuestra piel, y a su tránsito de percibir ilusionado le cuesta el tiempo que no te note. –Le dijo el amor a su amante la soledad. 

Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 

Poeta Intemporal ©.