ES MI PANZA
ES MI PANZA
Lleno la panza
pongo mi voluntad en una balanza
pero el hambre arrasa y pesa más,
pues el ansia no se aplaca con nada.
Es voraz la ansiedad de comer y comer
y después de cenar volverme a levantar para volver a nutrirme y volverme a empachar.
Y me dicen por ahí evita las grasas
y me aconsejan no comas dulces que el azúcar en mansalva es energía que desborda tus días, y no es necesaria tanta.
¿Pero cómo calmar este hambre si nada me sacia?
Pues nada, lo asumo y continúo comiendo
aunque esté cada día algo más enorme mi cuerpo.
Pero soy feliz y de esa manera sigo viviendo así
son mis días comiendo y comiendo,
pero la vida es mía, y la viviré como quiera
hasta que llegue el final de esta incesante merienda,
para volver a comer dulces, salados y lo que me apetezca.
Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo
Poeta Intemporal ©.
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