ANCLADO EN SU MIRADA

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ANCLADO EN SU MIRADA 

Me quedo ahí, me quedo atrapado, confiado y tranquilo. 
No es contra mi voluntad
 sino que lo hago con agrado, 
me quedo en tus ojos bañándome en tus pupilas
 acariciando ese mirar hacia la vida. 
Me quedo anclado en ese maravilloso brillar que tiene la alegría cuando me miras. 
Me quedo anclado más allá del tiempo
 de las lejanías de la vida 
donde no pasa ningún día en el que no goce bailando en tus ojos de luz divina. 
Me quedo ahí, no me busquen en ningún lugar
 no estaré para nadie nunca más, 
solo en ella basándose mi ansiedad en suspirar, y toda mi alegría viva de tantas caricias cuando me miras, dejando las penas olvidadas y deslucidas. 
Porque junto a su mirada soy la verdad del gozar la vida. 
…Y al levantarme en las mañanas solo tengo que mirarla
 y ahí se ancla mi felicidad por siempre para toda la vida, para lo eterno y toda su dicha. 
Porque me quedo junto a eso… 
Junto a ese maravilloso sentimiento, 
el mirar esos ojos que me entregan la alegría de sentir el amor y poder disfrutarlo, al poder seguir viviendo. 
Me quedo en ese lugar… 
Me quedo quieto
 solo mirándola
 solo sabiendo que está ahí y no deja de hacerlo
con ojos de amor eterno. 
Me mira, me quedo quieto
 solo eso. 






Autor: Miguel Ángel Pérez Salcedo 
Poeta Intemporal ©. 

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